Crítica de ‘SANDMAN’, una serie que ha conseguido lo imposible

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Chicos, nunca hay que abandonar los sueños infantiles.

Esta review NO tiene spoilers de ‘Sandman’

Cuanto más lea sobre ‘Sandman’, más escucharás que esta es realmente una historia sobre la narración. Mientras ‘Sandman’ técnicamente trata de Morpheus, un tipo pálido que resulta ser la personificación de los sueños, la preciada serie de cómics de DC explora mucho más que el mundo de este personaje.

A lo largo de esos primeros 75 números, sin mencionar todos los especiales y spin-offs que siguieron, la obra maestra de Neil Gaiman utiliza los sueños como una puerta de entrada a la mitología, la historia y una deconstrucción de la realidad misma. ¿Qué es una historia sino un sueño compartido? Los sueños no son reales, se nos dice, pero los sueños y las historias también tienen el poder de dar forma a la realidad en el mundo de la vigilia al cambiar fundamentalmente tanto a los narradores como a los oyentes.

Entonces, es curioso que ‘Sandman’ sea conocido por ser una historia difícil de adaptar y volver a contar en otros medios. Si bien una versión reciente de Audible fue bien recibida por los fans, los esfuerzos para dar vida a Morpheus en la pantalla han sido literalmente una pesadilla para todos los involucrados.

En el estreno mundial de ‘Sandman’, el propio hilandero original de los sueños, Neil Gaiman, dijo: “Pasé más de 30 años impidiendo que se hicieran versiones de ‘The Sandman'”. Él tampoco está bromeando. Morpheus no es ajeno a las profundidades del infierno, y lo mismo puede decirse de innumerables adaptaciones cinematográficas que han languidecido durante mucho tiempo en el desarrollo.

Desde 1991, Hollywood ha tratado de capturar la esencia de ‘The Sandman’ en la pantalla solo para fallar una y otra vez. Una versión del guión era tan mala que Gaiman la describió como “no solo el peor guión de ‘Sandman’ que he visto, sino fácilmente el peor guión que he leído” (a través de ScreenRant). La desesperación habría tenido un día de campo con eso, parece.

Finalmente, ‘The Sandman’ se consideró imposible de filmar en forma de película. Como dijo Gaiman en la Comic-Con de este año, hacer una sola película de 3.000 páginas de cómics era como “tratar de poner el océano en un jarrón”. Para hacer justicia material, se tomó la decisión de probar con la televisión. Eric Kripke se aproximó a ‘Sandman’ antes de ‘The Boys’, pero fueron David S Goyer y Allan Heinberg quienes finalmente ganaron con un acuerdo de Netflix en 2019. Y ahora aquí estamos con diez episodios de una hora de duración (más o menos) adaptados de los dos primeros arcos, llamados ‘Preludios y Nocturnos’ y ‘La casa de muñecas’.

Esa es toda la historia, pero ¿qué pasa con la historia real de la serie en sí? ¿Es este nuevo ‘Sandman’ de lo que están hechos los sueños? ¿O debería haberse quedado en el infierno del desarrollo donde muchos creen que pertenece? Después de ver los diez episodios más de una vez, le da mucha alegría a este fan desde hace mucho tiempo revelar que ‘The Sandman’ es mucho, mucho mejor de lo que tiene derecho a ser.

Gran parte del material de origen se adapta fielmente aquí, pero se cambia o amplía lo suficiente para hacer que este “océano” de texto encaje casi a la perfección en lo que es esencialmente un “jarrón” más grande. Y, lo que es más importante, las piezas que se han modificado o agregado se sienten como si siempre hubieran estado aquí.

La huella dactilar de Neil Gaiman recorre estos diez episodios, al igual que otras exitosas adaptaciones de su obra como ‘Good Omens’ y ‘American Gods’. Sin embargo, vale la pena señalar que, al igual que sus cómics originales fueron en realidad una colaboración con muchos artistas, dibujantes, rotulistas y más talentosos colaboradores, lo mismo también se puede decir de la serie.

eleanor fanyinka, jenna coleman, the sandman

Netflix

De hecho, eso es aún más cierto aquí dada la escala de esta producción. Netflix realmente puso todo su Netussy en este proyecto, bañando al equipo de efectos visuales con la cantidad de dinero que avergüenza al equipo de Marvel. Bueno, en realidad no sabemos si eso es cierto, pero parece que sí, porque muchas escenas aquí parecen haber sido sacadas directamente de la mente de Gaiman por cortesía del propio Morpheus.

Desde nuestra llegada a The Dreaming hasta el regreso de Sandman a este reino, el primer episodio por sí solo parece mucho más impresionante, y costoso, que casi cualquiera de los otros grandes éxitos de Netflix. Solo ‘Stranger Things’ puede rivalizar con ‘Sandman’ en este sentido, lo cual es impresionante dado que la serie de Gaiman se basa mucho más en este tipo de imágenes de otro mundo.

En cuestión de minutos, estarás gritando “Cuélgalo en el Louvre” en tu pantalla, solo para luego ser recibido con algo aún más hermoso hasta que tu voz se quede ronca en el episodio dos. Pero querrás seguir dándolo todo de todos modos, porque ‘Sandman’ tiene la habilidad de terminar cada episodio con algo que te atrae para más, incluso si algunas de esas entregas anteriores se sienten más independientes.

Ahora, aquí es donde la narración falla un poco. Si bien los guionistas hacen un trabajo admirable al unir estos capítulos individuales con arcos serializados más largos, parece que la primera temporada llega a un final natural con el episodio seis, solo para comenzar de nuevo con un nuevo arco un poco más débil en la mitad posterior.

Los números de ‘La casa de muñecas’ se encuentran entre las mejores historias de ‘Sandman’ jamás escritas, y aunque los momentos destacados como la convención de asesinos en serie se traducen bien aquí, hay otros en los que la narrativa se prolonga un poco o incluso se confunde con algunos saltos en la lógica.

Todavía hay mucho que amar de esos últimos cuatro capítulos, pero su ambición rara vez está a la altura de los que la preceden. Quizás una división a mitad de temporada habría beneficiado a la serie, creando cierta distancia entre estas dos primeras mitades para que puedan valerse por sí mismos.

vivienne acheampong, the sandman

Netflix

Mirando hacia atrás, los momentos que probablemente harán que los fans hablen más se pueden encontrar en capítulos anteriores como ‘Una esperanza en el infierno’, donde Morpheus lucha contra Lucifer, o ‘El sonido de sus alas’, donde la hermana de Dream, Death, te dejará llorando.

Incluso con tantos momentos destacados como estos para elegir, nada de esto funcionaría si no fuera por el elenco que se ha reunido aquí. Podríamos hablar interminablemente sobre el talento que está involucrado, pero la hermana de Dream antes mencionada vendrá por todos nosotros eventualmente, por lo que tendremos que conformarnos con algunos aspectos destacados.

Sin duda, habrá mucha fanfarria en torno al Lucifer de Gwendoline Christie y el Death de Kirby Howell-Baptiste, lo cual es particularmente satisfactorio dado el lloriqueo que escuchamos de algunos trolls intolerantes cuando se anunció por primera vez su casting. Lo mismo ocurre con el papel de cambio de género de Jenna Coleman como Johanna Constantine, que prácticamente exige expandirse en un spin-off muy necesario.

Pero casi todos en este elenco lo dan todo, incluido un David Thewlis extremadamente espeluznante y también Vivienne Acheampong, que es más que encantadora en el papel de Lucienne. Además de todo eso, Boyd Holbrook ofrece la mejor actuación de su carrera como The Corinthian, una pesadilla escapada que también es encantadora de una manera muy diferente, mucho más siniestra. Y luego, por supuesto, está Tom Sturridge, quien interpreta al mismísimo Rey de los Sueños. Mucho dependía de que él lo hiciera bien y, afortunadamente, Tom supera todas las expectativas.

Es fácil ver por qué Gaiman y Heinberg terminaron eligiendo a Sturridge entre los miles que hicieron el casting. Desde su fisicalidad precisa de cómic hasta esa voz profunda, susurrada pero dominante, hay un aspecto de otro mundo en la actuación de Tom que se reconcilia cuidadosamente con la humanidad que Morpheus a menudo se esfuerza tanto por reprimir.

mason alexander park, the sandman

Netflix

La versión de Mason Alexander Park sobre Desire también se siente etérea en un sentido divino, pero mientras Morpheus se contiene, Desire va con todo, abrazando por completo cada impulso y, bueno, el deseo.

Con este tipo de papel, existe el riesgo de complicar demasiado las cosas, tomando esa arrogancia en una dirección de pantomima, pero Mason se deleita con el papel sin dejar que los consuma. Detrás de cada acción y cada palabra, hay una sensación subyacente de peligro en su actuación que es emocionante de ver.

Si tan solo hubiéramos podido ver más de esto en la primera temporada. Esa es una queja común de la que estamos seguros muchos fans se harán eco en los próximos días. Ojalá hubiera más Lucifer… y Dead… y Corinthian… y el Dream… y la lista continúa.

En cuanto a las quejas, esta es de las muy buenas. Es un piropo decir que la gran mayoría de este elenco es demasiado bueno en cada uno de los roles elegidos, por lo que terminamos sintiéndonos engañados cuando no tienen tanto tiempo frente a la pantalla como nos gustaría.

El propio Morfeo dijo una vez en los cómics que: “El precio de conseguir lo que quieres es conseguir lo que alguna vez quisiste”. Pero todo este deseo solo puede ser algo bueno cuando se trata de ‘Sandman’, suponiendo, por supuesto, que Netflix de hecho traiga a todos de regreso para una segunda temporada.

Después de evitar que se hicieran varias versiones de ‘Sandman’, el equipo de Gaiman finalmente logró lo imposible al crear algo que los fans habían esperado durante mucho tiempo, pero que no se atrevían a soñar. Y ahora que finalmente ha llegado el espectáculo, estamos ansiosos por compartir esta historia, este sueño, con el resto de vosotros en casa.

Fuente: Hipertextual.com

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